Hechos y mitos
Mito 1
Falta control sobre la producción de carne de vacuno
Mito 2
Polonia vende carne de vacuno de origen desconocido a la Unión Europea
Mito 3
La carne de vacuno polaca es peor que la extranjera
Mito 4
En Polonia no se cuida el bienestar del ganado
Mito 5
Gracias al acuerdo comercial con Mercosur, llegará a Polonia carne sudamericana de mayor calidad
Mito 6
La carne que llega a nuestras mesas está llena de productos químicos
Mito 7
La producción de carne de vacuno es la más perjudicial para el medio ambiente
Mito 8
También se sacrifican animales enfermos
Mito 9
Las irregularidades detectadas en uno de los mataderos a principios de 2019 son comunes en el sector polaco
Mito 10
Sólo los productores polacos infringen la ley
Mito 11
La carne de las granjas con vacas lecheras es siempre de calidad secundaria y proviene de animales de bajo valor de sacrificio.
Mito 12
La leche de las granjas polacas es de calidad inferior en comparación con la leche producida en los países de Europa occidental y no cumple las normas de calidad.
Mito 13
En Polonia se comercializa leche que contiene antibióticos y otros inhibidores.
Hecho:

El Reglamento (CE) nº 1828/2006 de la Comisión Europea impone a los productores de carne de vacuno polacos y europeos la obligación de exigir certificados de competencia a sus empleados. Además, este mismo reglamento prohíbe el sacrificio de animales sin aturdimiento previo realizado de forma que se reduzca al mínimo el dolor del animal. Los productores polacos también están sujetos a la legislación nacional que prohíbe estrictamente el sacrificio de ganado fuera de un matadero o cuando el animal está sano, pero ha sufrido un accidente. En este caso, se requiere de un certificado por parte del veterinario responsable y del propietario del animal herido y la propia carne se vuelve a examinar antes de su comercialización.

Conforme a la ley de 29 de junio de 2007 sobre la organización de la cría y la reproducción de los animales de granja, los bovinos se controlan, entre otros, mediante un sistema de marcas auriculares numeradas individualmente. Esta norma excluye a las vacas que no hayan sido sometidas a controles veterinarios en el matadero. Las soluciones aplicadas por el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural deben ampliar la supervisión para incluir la obligación de invalidar el pasaporte de un animal que haya muerto o haya sido sacrificado en los próximos días por orden de la Inspección Veterinaria. La institución también trabaja en la introducción de chips subcutáneos basados en la tecnología Blockchain. Este dispositivo recopilará toda la información sobre el animal desde su nacimiento hasta su sacrificio. También se está considerando la posibilidad de aumentar las sanciones por incumplimiento de las normas. La introducción de las modificaciones propuestas en los reglamentos excluirá por completo del mercado la carne que no realice controles en las distintas fases de producción.

En la UE, se aplica la misma legislación a todos los criadores y productores. En la práctica, esto significa adaptar las fases de cría y sacrificio de los animales a las restrictivas normas de la UE. El sabor y la calidad de nuestra carne son muy apreciados por los consumidores de Italia, Alemania, Francia y Gran Bretaña. Estos países están a la cabeza de las importaciones de carne de vacuno polaca. A fin de mejorar la calidad de la producción de carne de vacuno, el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural trabaja en una modificación de la legislación polaca, que obligará a los productores a elevar los ya elevados estándares de cría. Uno de los cambios propuestos es la introducción de una supervisión las 24 horas del día en los mataderos. El reglamento que se está desarrollando permitirá excluir las actividades que no se ajusten a la normativa. Como resultado, los consumidores pueden estar seguros de que sólo la carne de la mejor calidad llegará al mercado.

De acuerdo con la legislación nacional y de la UE aplicable, está prohibido el sacrificio sin aturdimiento previo del animal. Al mismo tiempo, los agricultores y productores deben evitar el sufrimiento del ganado en caso de lesiones como, por ejemplo, fracturas. La cría se realiza bajo la constante supervisión de un veterinario. La tendencia general muestra una gran y creciente preocupación por el bienestar del ganado y las puntuales infracciones de las normas son criticadas de inmediato por la industria. Uno de los elementos clave de la preocupación por el bienestar animal es el transporte de los animales. Conforme a las disposiciones establecidas en el Reglamento (CE) n° 1/2005 del Consejo, los bovinos deben transportarse de forma que no causen lesiones, sufrimientos ni caídas. Los camiones deberán estar equipados de forma adecuada, entre otras cosas, con bebederos automáticos, jaulas suficientemente altas y rampas de carga. Además, cuando la carga y descarga dure más de 4 horas, los animales deberán tener acceso a alimentos y a agua. También se recomienda conducir con tranquilidad y calcular una ruta que combine distancias cortas sin curvas cerradas.

Mercosur es una organización económica fundada en Sudamérica. El grupo incluye países como Brasil, Argentina y Paraguay. El acuerdo comercial celebrado entre la Unión Europea y los países de Mercosur se aplica a las cuotas libres de impuestos de esa carne, que se comercializará en el mercado comunitario. La mayor oposición de los representantes de todas las industrias cárnicas la plantean las normas aplicables en dichos países. Según el informe de la auditoría de 2018, realizada por expertos de la Comisión Europea, en la cría de ganado vacuno en Brasil se permiten sustancias prohibidas por la legislación europea. Además, las vacas sudamericanas, a diferencia de las polacas, no están obligadas a mantener registros de sustancias administradas en la etapa de cría, lo que hace imposible que los veterinarios diagnostiquen a los animales de forma efectiva. Las diferencias en las normas de cría y producción de la carne de vacuno pueden ser peligrosas para los consumidores que buscan productos de la más alta calidad, garantizados por controles fiables y normativas exigentes.

El artículo 27 de la ley de protección animal indica directamente que los tratamientos médicos y veterinarios son aceptables para salvar la vida o la salud. Esta misma disposición determina quién puede llevar a cabo el tratamiento del ganado en la cría; legalmente sólo puede hacerlo una persona con las cualificaciones adecuadas, que llevará a cabo el tratamiento de tal forma que se reduzca el sufrimiento y el estrés del animal. El artículo 16 de la ley sobre productos de origen animal amplía los requisitos encaminados a una prohibición total por parte de los productores en la comercialización de carne de vacuno, aunque sea con cantidades mínimas de medicamentos. Si se sacrifica un animal que no cumpla con este requisito, el ganadero no tendrá derecho a ningún tipo de indemnización. No sólo se analiza el contenido de medicamentos en el ganado, sino también en el agua potable y en los piensos.

Numerosas organizaciones pseudo-ecologistas intentan convencer a los consumidores de que se necesitan 15.000 litros de agua para producir 1 kg de carne. De hecho, más del 90% del agua que consume el ganado es „agua verde” procedente de las precipitaciones. Los científicos calculan que producir 1 kg de carne de vacuno consume un máximo de 50 litros de agua dulce.

Al contrario de lo que se cree, la producción de carne de vacuno solo es responsable de una fracción mínima de las emisiones de gases de efecto invernadero. Según las estadísticas de la FAO en la UE, la fermentación intestinal del sector ganadero asociada a la producción de metano ha reducido a la mitad su impacto medioambiental entre 1990 y 2014. Según datos de la FAO*, las emisiones procedentes del ganado han disminuido en un 51%, debido principalmente a la transición a un sistema de ganadería más especializado.

Cabe recordar que la contribución de los distintos sectores agrícolas a las emisiones de gases de efecto invernadero no es sólo de la carne de vacuno, sino también de otros productos agroalimentarios, como las frutas y hortalizas, que también necesitan ser calentados o enfriados según sea necesario, así como transportados, fertilizados y sometidos a cuidados buscando la alta calidad de los productos que llegan a las estanterías de las tiendas.

* Fuente: http://www.fao.org/faostat/en/#data/GE/visualize

Conforme al artículo 12 de la Directiva 93/119/CE del Consejo, los animales enfermos o heridos deben ser sacrificados dentro de la explotación. Los requisitos legales a este respecto son implacables para los fabricantes que intentan desviarse de las normas adoptadas. Debido a los altos costes de producción, no es rentable para los criadores arriesgarse a sacrificar animales enfermos. El proceso de producción también está supervisado por veterinarios, cuyos permisos y exámenes son necesarios para que la carne polaca llegue finalmente a las mesas. En algunos casos, se permite el transporte de un animal enfermo, aunque a condición de que no cause más sufrimiento al animal. Los puntuales casos de infracción de la ley son criticados principalmente por la propia comunidad de ganaderos, que se preocupa por la reputación y la calidad de la carne de vacuno polaca en los mercados nacionales y extranjeros.

Un reportaje de enero de 2019 sobre un matadero de Kalinowo mostraba una sola planta como ejemplo de todo el sector nacional. El material presenta un caso de sacrificio ilegal de ganado herido en una de las plantas polacas. El Reglamento (CE) nº 1099/2009 del Consejo establece claramente las normas para el sacrificio de los animales destinados a carne. Estas normas fueron incumplidas deliberadamente por el propietario de la instalación y la situación fue resuelta por los organismos nacionales encargados de hacer cumplir la ley. Esta incidencia a escala polaca fue inmediatamente criticada por parte de los criadores de ganado. Fueron los propios productores polacos los que iniciaron sus esfuerzos para endurecer las sanciones por infringir las normas. La publicación de enero unió a todo el sector, que quería mejorar constantemente la calidad de la carne producida.

Los casos de incumplimiento de las normas sobre sacrificios detectados en enero de 2019 fueron puntuales en Polonia, pero por desgracia también se producen en otros mercados. Varios países de la UE también se han enfrentado a casos similares en el pasado. En diciembre de 2017 y octubre de 2018, se detectó un incumplimiento flagrante de las normas de producción en dos mataderos alemanes durante el sacrificio de los animales. En noviembre de 2018, se publicaron unas grabaciones realizadas en un matadero francés de Boischaut, donde se sacrificaban animales sin el aturdimiento requerido. Tras su publicación, los mayores clientes de los mataderos rescindieron su cooperación. En febrero de 2019, los veterinarios checos descubrieron una planta cárnica ilegal en Praga. Se requisó más de una tonelada de carne del matadero sin la documentación ni certificados requeridos. En octubre de 2019, las autoridades veterinarias austríacas descubrieron que se había vendido carne no apta para el consumo a 10 países, entre ellos la República Checa y Alemania. Debido a su preocupación por la calidad de todo el mercado, los productores polacos enviaron una carta abierta a los miembros del Parlamento Europeo con un llamamiento a la unificación de la normativa comunitaria basada en los cambios introducidos por el Ministerio de Agricultura polaco con el apoyo de las organizaciones del sector.

En Polonia, al igual que en otros países europeos, además de los rebaños de carne de pura raza, el engorde del ganado se realiza también en rebaños destinados a la obtención de leche. Las vacas que no están destinadas a ser apareadas con toros lecheros (renovación del rebaño) se inseminan con semen de toros de carne como parte del denominado cruce de mercancías. Estos toros, cuando se les proporcionan las condiciones de alimentación adecuadas, logran ganancias diarias muy altas y un alto rendimiento en la matanza. Esos resultados se logran en gran medida gracias al denominado efecto de heterosis, que se produce en el caso de los cruces de ganado entre razas. Este cruce logra una calidad de carne similar a la del ganado vacuno de pura raza y es una fuente de carne de alta calidad culinaria. La producción de este tipo de carne en rebaños de vacas lecheras es una importante fuente de ingresos en las granjas polacas. La prueba del alto valor de sacrificio de estos cebaderos es una parte importante de la exportación de carne de vacuno polaca a los países de la UE y a los mercados de terceros países.

Según las normas de calidad vigentes en Polonia, la leche cruda es un producto natural, obtenido en el proceso de ordeñar vacas sanas, como si no se hubiera completado y no se hubiera privado de nada. Los requisitos detallados que figuran en el Reglamento del Ministro de Agricultura y Desarrollo Rural, de 18 de agosto de 2004, sobre los requisitos veterinarios de la leche y los productos lácteos (Diario de Leyes Nº 188, epígrafe 1946, en su forma enmendada) relativos a la leche cruda definen los requisitos veterinarios para la producción de leche y productos lácteos. El Reglamento especifica claramente los requisitos de higiene para el ordeño, la recogida y el transporte de la leche desde la granja hasta el punto o establecimiento. También regula los requisitos de producción, envasado y etiquetado. En la actualidad, sólo se recoge en Polonia la leche clasificada en la clase “Extra”. La leche recogida en las granjas polacas no puede contener más de 100.000 microorganismos en 1 mililitro, marcados con el método de las plaquetas a 300 C. Tampoco debe contener agua añadida y tener un punto de congelación a una temperatura no superior a -0,520 C. La leche desnatada debe contener un mínimo de 28 g por litro y al menos un 8,5 % de materia seca no grasa.

De conformidad con el Reglamento (CE) No 853/2004 del Parlamento Europeo y del Consejo, de 29 de abril de 2004, por el que se establecen normas específicas de higiene de los alimentos de origen animal, “la leche cruda no podrá comercializarse si contiene residuos de antibióticos por encima de los límites establecidos en dicho Reglamento respecto de cualquiera de las sustancias mencionadas en los anexos I y III del Reglamento (CEE) No 2377/90”. La situación jurídica actual de Polonia a este respecto se establece en la Ley de seguridad alimentaria y nutricional de 25 de agosto de 2006, en la que se reconoce como perjudicial para el hombre un producto alimenticio cuyo consumo, en las condiciones de su uso previsto, puede causar efectos adversos para la salud y la vida humanas. Todas las concentraciones permitidas de residuos de sustancias farmacológicamente activas (LMR) son uniformes para todos los países de la Unión Europea.

En Polonia, la vigilancia y la supervisión son responsabilidad del Departamento de Higiene de los Alimentos de Origen Animal del Instituto Veterinario Nacional – Instituto Nacional de Investigación en Puławy y de todos sus establecimientos de higiene veterinaria subordinados. Los laboratorios que operan para las necesidades de la industria lechera polaca realizan cientos de miles de análisis cada año para garantizar la calidad y la seguridad adecuadas de los productos lácteos.

En las plantas lecheras polacas, la evaluación de los residuos de las denominadas sustancias inhibidoras en las muestras de un determinado lote de leche se realiza sobre la base de pruebas enzimáticas y microbiológicas. Como parte de la vigilancia de los residuos de sustancias inaceptables, se utilizan pruebas enzimáticas rápidas en cada lote de leche cruda en la llamada rampa. Además, cada dos meses aproximadamente se realiza una evaluación de los residuos de estas sustancias en las muestras de cada lote de leche de cada proveedor mediante una prueba microbiológica con un espectro de detección muy amplio. Además, en los últimos años se ha establecido en Polonia un programa nacional “Leche polaca libre de residuos de medicamentos veterinarios y otras sustancias inhibidoras”, que prevé la creación de puestos en las granjas para ensayar los residuos mencionados en la leche de cada vaca durante la recogida de la leche.

Organizaciones sectoriales
que reúnen
a los productores polacos carne y la leche
Asociación Polaca de Criadores y Productores de Ganado
Asociación Polaca de Criadores y Productores de Ganado

ul. Rakowiecka 32
02-532 Varsovia,

teléf. +48 22 849 19 10

bydlo@bydlo.com.pl

Asociación Polaca de Productores de Ganado
Asociación Polaca de Productores de Ganado

ul. Smulikowskiego 4
00-389 Varsovia,

teléf. +48 22 622 09 87

biuro@beef.org.pl

Federación de Asociaciones de Empresarios-Arrendatarios y Propietarios Agrícolas
Federación de Asociaciones de Empresarios-Arrendatarios y Propietarios Agrícolas

ul. Hoża 66/68
00-682 Varsovia,

teléf. +48 22 372 03 49

biuro@federacjarolna.pl

Unión de Productores y Empleadores de la Industria Cárnica
Unión de Productores y Empleadores de la Industria Cárnica

ul. Aleje Ujazdowskie 18 lok. 16
00-478 Varsovia,

teléf. +48 22 696 52 70

biuro@upemi.pl

Asociación de Carniceros y Productores de Embutido de la República de Polonia
Asociación de Carniceros y Productores de Embutido de la República de Polonia

Ul. Miodowa 14
00-246 Varsovia,

teléf. +48 22 635 01 84

biuro@srw.org.pl

Federación Polaca de Criadores de Ganado y Productores de Leche
Federación Polaca de Criadores de Ganado y Productores de Leche

ul. Żurawia 22 lok. 101
00-515 Varsovia,

teléf. +48 22 502 33 43

pfhb@pfhb.pl

Asociación de la Carne Polaca
Asociación de la Carne Polaca

ul. Chałubińskiego 8
00-613 Varsovia,

teléf. +48 22 830 16 48

info@polskie-mieso.pl

Actos Legales

sobre los requisitos y el comportamiento para el mantenimiento de las especies de animales de granja para las que la legislación de la Unión Europea establece normas de protección

sobre las condiciones mínimas para el mantenimiento de especies de animales de granja distintas de aquellas para las que se establecen normas de protección en las disposiciones de la Unión Europea § 1. El Reglamento define, entre otras cosas, las condiciones mínimas para el mantenimiento del ganado vacuno, con excepción de los terneros

sobre protección de los animales

sobre organización de la cría y reproducción de ganado

sobre productos de origen animal

La carne y la leche polacas en
el mundo
Alemania Francia Holanda Chequia Suecia Austria Grecia España Israel Gran Bretaña Portugal Turquía Italia

Proyecto financiado por el Fondo de Promoción de la Leche